CLAVES PARA PERDER PESO (Y NO RECUPERARLO)

Se acerca el verano y a muchos les entran las prisas por perder peso de cara a esta época del año. Sin embargo, lamentamos decirte que, la gran mayoría de las personas que se plantean una “operación bikini”, terminan por abandonar el propósito en el mejor de los casos. O peor, consiguiendo el temido efecto rebote y repitiendo cada año el mismo círculo vicioso.

¿Quieres saber de una vez por todas cómo plantear una pérdida de peso que perdure en el tiempo?

Laura Pérez Naharro - Unidad de Nutrición Neolife e Investigación y Desarrollo Neoactives.


 

Finalidad del objetivo y tiempo

¿Para qué quieres perder peso? ¿No estás a gusto con tu físico y quieres modificarlo? ¿Te preocupa tu estado de salud y quieres mejorarlo?

Quizás un poco de todo. No es malo el querer buscar una mejor versión en nuestro cuerpo. Los objetivos estéticos son totalmente aceptables. Y en ocasiones, no hay aparentemente ningún problema clínico importante, y la finalidad de perder peso puede ser exclusivamente a nivel estético.

Independientemente de dónde recae un mayor peso en cuanto a la finalidad, hay que ser consciente de que cualquier cambio conlleva tiempo.

En el caso de padecer ciertas alteraciones metabólicas (hipertensión, obesidad, diabetes tipo 2, alteraciones en el perfil lipídico y/o resistencia a la insulina) el tiempo que debemos tener previsto es algo a largo plazo. No porque no se vaya a conseguir cierta mejoría en el corto y medio plazo, sino que el llegar a esa situación, significa, probablemente, que no existen hábitos adecuados y que se han mantenido durante mucho tiempo. Esta persona si se plantea una “dieta de choque” o cualquier otra restrictiva, perderá peso de forma significativa todo el tiempo que pueda aguantar seguir dichas limitaciones. Pero llegará el día en el que termine por abandonar y retomar la rutina que ya tenía establecida. Con un efecto rebote indudable.

Quien ya tiene instaurado un estilo de vida saludable y, por cualquier razón ha aumentado su porcentaje graso, probablemente le lleve un menor tiempo. Simplemente deberá atender a corregir o mejorar aquello que le ha provocado empeorar su composición corporal. Por ejemplo, una época de mayor carga de trabajo en la que ha descuidado la planificación de menús semanales. Ante esta situación solo tendrá que retomar la rutina y estudiar la forma que le resulte más cómoda para seguir con esos hábitos alimentarios en el caso de que otro contexto similar se presente.

Objetivos físicos realistas 

Ya no solo debemos plantearnos objetivos realistas en cuanto a resultados cuantificables. Nadie va a perder 20 kg en un mes. Sino que también es necesario plantearnos objetivos realistas a nivel físico.

Las redes sociales y medios de comunicación provocan una distorsión de la realidad, creando falsas e inalcanzables expectativas a nivel físico.

Debemos ser conscientes de que cualquier foto publicada en estos medios está estudiada al completo. Y en muchas ocasiones se usan editores para mejorar la apariencia. Si lo hacemos nosotros en nuestros perfiles, eligiendo aquella que consideramos que salimos más favorecidos, ¿no lo va a hacer una empresa o persona influyente cuya finalidad es vender?

Los cánones de belleza varían con los años. Pero la salud se valora siempre de la misma forma.

El objetivo a nivel físico debe ser una versión mejorada de nosotros pero que pueda ser mantenida en el tiempo. De nada sirve un vientre definido si esto supone estar pasando hambre, sufrir alteraciones hormonales (retirada del periodo en el caso de la mujer) o pérdida de rendimiento deportivo por falta de energía.

Los problemas emocionales no los soluciona la pérdida de peso

Esto es algo que tiene mucho que ver con el planteamiento de objetivos y finalidad. Pues hay quienes buscan la pérdida de peso pensando que cuando esto suceda, se sentirán mejor con ellos mismos. Los trastornos emocionales no se van con los kilos, sino con ayuda psicológica.

Cuando tiene lugar esta situación, no es necesario aplazar la pérdida de peso. Pero sí debe ir acompañada de supervisión profesional a nivel interdisciplinar. En este caso, nutricionista y psicólogo deberán abordar a la persona en conjunto. Y en el caso de comenzar por solo la ayuda de uno, mejor a nivel psicológico.

Se puede comer mucho y perder grasa

Estamos tan acostumbrados a asociar perder peso con restricción, hambre y castigo que resulta complicado contemplar este proceso sin ello.  Y sí, se puede (y debe) comer mucho para conseguir perder peso. Es fundamental estar saciado. ¿De qué sirve desayunar 40g de pan con 1 loncha de pavo si al rato tengo hambre? O, como muchas veces sucede, cenar una crema de verduras y a las 2 horas atracar la nevera. O idas y venidas a la cocina. Que si primero un trozo de chocolate 85% cacao, luego un yogur desnatado, un puñadito de nueces, hasta que terminamos con las galletas (y el sentimiento de culpa o remordimiento posterior).

Para ello, es importante incorporar gran cantidad de vegetales en nuestros platos. Aportan mucho volumen y nutrientes en relación al aporte calórico. También fuentes proteicas de calidad. Los derivados de carne o pescado, como el fiambre de pavo o surimi, aunque aporten pocas calorías, no sacian ni tampoco son interesantes nutricionalmente.

Sin olvidar el agregar una pequeña cantidad de grasas de calidad a nuestras preparaciones: frutos secos, aceite de oliva virgen extra o aguacate.

Es importante también mantener una curva de glucosa estable. Algo que podemos conseguir con las recomendaciones anteriores y evitando los granos y harinas refinadas. Optando por fuentes de carbohidratos ricas en fibra como las legumbres, quinoa, arroz integral o patata cocida y refrigerada previamente (por su aporte en almidón resistente).

Añadir especias como la canela, también regula la carga glucémica. ¿Has probado unas gachas de avena con canela, proteína de suero y almendras? Es un desayuno bastante interesante en una pérdida de grasa.

¿Existen suplementos eficaces que ayuden a perder peso?

Al igual que un alimento o nutriente de forma aislada no puede garantizar ningún efecto, el uso de un determinado suplemento por sí solo tampoco.

En combinación con un déficit calórico, el cual podemos seguir con los consejos anteriores y manteniendo una actividad física regular diaria, sí podemos tener en cuenta determinadas formulaciones y obtener diferencias significativas en nuestros resultados.

Como recomendación, NeoFD Control es nuestro gran aliado en un contexto de pérdida de peso. Gracias a su aporte en 5-HTP y L-teanina nuestro apetito está controlado. Además, contribuye a mantener la saciedad, por su contenido de Garcinia cambogia y a mantener la glucosa estable, debido a su aporte en cromo.

Pero lo dicho, para perder peso y que perdure en el tiempo: objetivos realistas, equilibrio emocional y mejora de hábitos. Y si quieres un plus, NeoFD Control