LOS EFECTOS DEL ALCOHOL EN NUESTRO CUERPO
Consumir bebidas alcohólicas en exceso puede dar lugar a numerosas enfermedades, hasta 30, además de poder causar dependencia.
La ingesta de alcohol no es conveniente para nadie, pero es aún menos recomendable si te encuentras realizando algún tipo de planificación de nutricional (dieta) o, simplemente, quieras cuidarte y mantener el peso.
Tania Mesa - Unidad de Nutrición Neolife e Investigación y Desarrollo Neoactives
Si tratamos el alcohol desde el punto de vista nutricional, es considerado como una fuente de calorías vacías, debido a la gran cantidad de calorías que aporta y por su escaso aporte nutricional. Por ello, si quieres realizar, o estás realizando, una dieta para perder peso, deberías desterrarlo de tus pensamientos.
Enfermedades, los efectos nocivos del alcohol
El hábito de beber en compañía se encuentra aceptado como un acto social y, pese a la cantidad de información que nos rodea acerca de los problemas que puede causar en nuestro cuerpo, no somos conscientes de ello. La enfermedad más habitual por su consumo abusivo es el alcoholismo, caracterizada por la dependencia física y mental de esta sustancia y por los cambios orgánicos patológicos que produce en nuestro cuerpo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) (1), el alcohol podría estar estrechamente relacionado con más de 30 enfermedades, destacando trastornos mentales, alteraciones neurocognitivas y digestivas, hemorragias esofágicas, cirrosis hepática y cáncer, entre otras.
Qué aporta el alcohol a nuestro organismo
Nada. Una de las características nutricionales del alcohol es la ausencia de propiedades nutritivas. Cuando ingerimos alcohol (2), el 20% se absorbe en el estómago mientras que el 80% restante llega hasta el intestino delgado, donde prosigue su proceso de absorción.
En general, el paso del alcohol a la sangre se produce entre 30 y 90 minutos después de haberlo ingerido, aunque la velocidad de absorción depende de varios factores, como: la cantidad ingerida, el tipo de bebida alcohólica, los grados de alcohol que contenga, la comida que hayamos ingerido junto a la bebida y la fisiología de cada persona (sexo, edad e incluso raza, como factores determinantes).
El hígado es el principal responsable en la acción de metabolizar el alcohol, a través de la enzima deshidrogenasa que genera una molécula (el acetaldehído), responsable de gran parte de los efectos nocivos del alcohol. El excedente de esta sustancia que no sea absorbida por nuestro cuerpo será eliminado a través de la orina (en gran parte), por el sudor y por exhalación (causando el mal aliento característico de la embriaguez).
En definitiva, el alcohol es peligroso para nuestros órganos, ya que el acetaldehído que se genera asociado a su consumo es un potente agente oxidante que ocasiona daño en diversos tejidos (neuronal, digestivo y hepático) que acelera de forma importante el proceso de envejecimiento.
Composición del alcohol
El alcohol que ingerimos habitualmente se conoce como etílico o etanol, y contienen un % variable de alcohol, que puede ir desde los 2 grados (cervezas y espumosos ligeros) hasta los más de 50 grados de algunos licores
Si quieres saber el contenido de alcohol etílico que tienen las bebidas, puedes calcularlo con la siguiente fórmula (3):
gramos de alcohol = (volumen en c.c.) x graduación x 0,8)/100.
Ten en cuenta que la densidad del alcohol es 0,8.
Por ejemplo, en una cerveza de 250 c.c. y de graduación 4,8 grados, la cantidad de alcohol absoluto es:
250 x 4,8 x 0,8 / 100 = 9 gr de alcohol puro
Es considerando como una fuente de calorías vacías, debido a su carencia de micronutrientes (aminoácidos esenciales, fibras, vitaminas y minerales), lo que lo convierte en un alimento nada nutritivo pero que ayuda a la ganancia de peso.
Cada gramo de alcohol puro nos aporta 7 kcal y cuanto mayor sea el grado de alcohol que contenga, mayor aporte de calorías vacías y más dificultad para eliminarlas.
¿Qué bebidas podemos tomar?
Para nuestra rutina diaria, lo más recomendable es el agua, con o sin gas. Reserva los refrescos “zero” calorías y otras bebidas no alcohólicas para cenas y eventos. Recuerda que, aunque los zumos, batidos y licuados son opciones sanas por estar compuestos de frutas y verduras (siempre que sean caseros), no debes abusar de ellos, ya que pueden contar con altos niveles de azúcares (fructosa) y terminarás consumiendo más cantidad de estos alimentos en formato líquido que en su forma original, al natural.
A continuación, te presentamos una comparativa de bebidas que recomendamos tomar de forma diaria, de forma moderada (para eventos sociales) y de forma puntual (ocasiones especiales).
Ya has visto que las bebidas destiladas son las que más calorías nos aportan, a las que habría que sumar el aporte calórico de los refrescos que las acompañarían (Cocacola, Redbull, Fanta, etc.), pudiendo llegar a ingerir unas 400 kcal por 100 ml.
Ya sabes, desde Neoactives queremos promover un estilo de vida saludable, en el que tenga primacía la buena alimentación y los hábitos conductuales saludables. De nada sirve estar cuidándose a lo largo de la semana, evitando el picoteo y dejando los antojos de lado, para descontrolarnos el fin de semana. Recuerda que el alcohol no solo puede echar por tierra nuestros objetivos de alimentación, también es perjudicial para nuestra salud y para nuestra estabilidad emocional debido al riesgo de dependencia.
BIBLIOGRAFÍA
(1) https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3307043/table/t1-arh-34-2-135/
(2) http://www.tabladecalorias.net/
(3) Fuente: Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. https://www.mscbs.gob.es/campannas/campanas07/alcoholmenores9.htm
