¿CONOCES LOS PELIGROS DE TENER EL COLESTEROL ALTO?
A pesar de las advertencias sanitarias, muchas personas siguen sin ser conscientes de la amenaza silenciosa que supone tener un nivel alto de colesterol en la sangre.
Dr. Alfonso Galán – Especialista en Medicina Interna. Equipo Médico Neolife e Investigación y Desarrollo Neoactives
El colesterol es una sustancia lipídica que el cuerpo necesita para crear células sanas, sintetizar diversas hormonas (como estrógenos o testosterona), la vitamina D y los ácidos biliares (que a su vez facilitan la absorción de otras grasas y ciertas vitaminas liposolubles), entre muchas otras funciones. Sin embargo, tener niveles altos de colesterol puede aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca.
Lo primero que hay que saber es que el colesterol se distribuye por el organismo a través de la sangre adherido a unas proteínas que forman lo que se denominan lipoproteínas. Según el tipo de proteínas asociadas, existen diferentes tipos de colesterol y no todos son igual de saludables. Veamos por qué.
Colesterol hay más de uno
El colesterol LDL o ‘malo’ transporta esta sustancia a todo el cuerpo, pero también tiende a acumularse en las paredes de las arterias, un proceso que a la larga produce su endurecimiento, con lo que se reduce su capacidad de adaptarse a los cambios de presión arterial, así como su estrechamiento, que tiene como consecuencia una reducción del flujo de sangre.
Por el contrario, el colesterol HDL o ‘bueno’ recoge el exceso de colesterol de los tejidos y lo lleva de nuevo al hígado donde se aprovechará posteriormente, como hemos explicado. Pero, ¿cómo podemos aumentar con este tipo de colesterol beneficioso y reducir el perjudicial?
Me sube el colesterol, ¿por qué?
La principal vía que provoca la acumulación de colesterol ‘malo’ es la alimentación, en concreto debido a la ingesta elevada de grasas saturadas -están presenten en alimentos de origen animal como las carnes, embutidos, la leche y sus derivados, y algunos productos de origen vegetal como el aceite de palma y el de coco- y de grasas trans que se encuentran, principalmente, en alimentos procesados, ‘comida basura’, bollería industrial, margarina, manteca, pasteles y tartas, aperitivos salados y productos fritos como las croquetas.
Otros factores de riesgo que favorecen un aumento del colesterol en sangre son el exceso de peso corporal y la falta de actividad física. En este último caso, se ha demostrado que el ejercicio aumenta el colesterol HDL (el bueno) a la vez que incrementa el tamaño de las partículas que componen el colesterol LDL, por lo que lo hace menos nocivo.
La edad es otra de las causas ya que, a medida que pasan los años, el cuerpo y el hígado eliminan cada vez menos colesterol LDL. Por otra parte, el tabaquismo daña las paredes de los vasos sanguíneos y los hace más propensos a acumular depósitos de grasa. Y, por último, hay que hablar de la genética de cada individuo ya que influye en el comportamiento del organismo ante los factores de riesgo.
Amenaza silenciosa
El mayor peligro de tener el colesterol alto es que no hay síntomas. Afortunadamente, un análisis de sangre rutinario basta para detectar el problema. En cuanto a las consecuencias de no hacer nada para controlar el nivel de colesterol, su acumulación y depósitos en las paredes de las arterias puede desembocar en la aterosclerosis. Estos depósito (placas de ateroma) pueden reducir el flujo sanguíneo de las arterias y provocar complicaciones tales como dolor en el pecho, ataques cardíacos e infartos cerebrovasculares (ictus).
Recomendaciones
Mantener un estilo de vida saludable es la forma más efectiva para reducir el colesterol alto. En lo que se refiere a la alimentación, debe ser baja en sal y rica en frutas, verduras y cereales integrales. Además, es necesario limitar la cantidad de grasas no saludables, especialmente las de origen animal y las de productos ultraprocesados, y aumentar las saludables, como las que podemos encontrar en los frutos secos, los pescados grasos ricos en omega 3 y el aceite de oliva virgen extra.
De igual modo, es importante mantener un peso saludable, así como abandonar el consumo de tabaco y alcohol, controlar el estrés y realizar ejercicio físico de forma diaria.
Por último, si quieres aportar una ayuda extra a tu organismo, Neoactives ha diseñado NeoCholesterol, un complemento que modula los niveles de colesterol para conseguir unos niveles óptimos, de forma controlada y siempre bajo supervisión médica.
En su composición se combinan productos naturales como la levadura de arroz rojo, uno de elementos más utilizados en el control de los niveles de colesterol, así como el ajo y la hoja de olivo, dos plantas utilizadas habitualmente de forma sinérgica para potenciar sus propiedades. Además, se incluye la co-enzima Q10, una molécula involucrada en la obtención de ATP celular y que es recomendable utilizar junto con la levadura de arroz rojo.
BIBLIOGRAFÍA
Ortega Anta, R. M. & Requejo Marcos, A.M. (2015). ‘Nutriguía: manual de nutrición clínica. Edición 2’. Editorial Panamericana.