CÚRCUMA, CURCUMINOIDES Y SU RELACIÓN CON LA SALUD

La cúrcuma, la especia milenaria con propiedades curativas que ha creado un legado cultural que trasciende las fronteras. Este tesoro dorado ha dejado una huella en la cocina, la medicina tradicional y las creencias religiosas, debido a sus múltiples beneficios para la salud que han sido respaldados por la ciencia.

David Baeza - Unidad de Nutrición Neolife e Investigación y Desarrollo Neoactives.


QUÉ ES LA CÚRCUMA Y CUÁLES SON SUS BENEFICIOS

La cúrcuma es una especia derivada de la planta Curcuma longa, que pertenece a la familia del jengibre. Se encuentra comúnmente en la cocina india y asiática, donde se utiliza tanto por sus propiedades culinarias como medicinales. La cúrcuma contiene un compuesto activo llamado curcumina, que se ha estudiado ampliamente debido a sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, antimicrobianas y anticancerígenas. La curcumina es responsable del distintivo color amarillo brillante de la cúrcuma, y es considerada el principal componente bioactivo de esta especia.

La curcumina ha sido objeto de numerosos estudios científicos debido a sus potenciales beneficios para la salud. Se ha demostrado que posee propiedades antiinflamatorias al inhibir diversas vías de señalización proinflamatorias en el organismo.

La inflamación es una respuesta natural del cuerpo frente a lesiones o agresiones, y tiene como objetivo iniciar el proceso de reparación y defensa. Sin embargo, cuando la respuesta inflamatoria se vuelve crónica o desregulada, puede contribuir al desarrollo y progresión de diversas enfermedades como la artritis reumatoide, la enfermedad inflamatoria intestinal, la diabetes tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares.

La curcumina como antiinflamatorio natural

La curcumina interviene en el proceso inflamatorio mediante múltiples mecanismos. En primer lugar, inhibe la activación del factor nuclear kappa B (NF-kB), una proteína que desempeña un papel crucial en la regulación de la respuesta inflamatoria. Al bloquear la activación de NF-kB, la curcumina reduce la producción de moléculas proinflamatorias, como las citoquinas y los mediadores químicos, que están implicados en la inflamación.

Además, la curcumina puede modular la expresión de enzimas clave involucradas en la inflamación, como la ciclooxigenasa-2 (COX-2) y la lipooxigenasa (LOX), que participan en la síntesis de mediadores inflamatorios. Al inhibir la actividad de estas enzimas, la curcumina reduce la producción de prostaglandinas y leucotrienos, compuestos inflamatorios que contribuyen a la respuesta inflamatoria en el organismo.

Otro mecanismo relevante de acción antiinflamatoria de la curcumina es su capacidad para modular la respuesta inmunitaria. La curcumina puede regular la actividad de células del sistema inmunológico como los macrófagos y los linfocitos, reduciendo su producción de sustancias proinflamatorias y promoviendo un ambiente antiinflamatorio.

Propiedades antioxidantes

Además de su acción antiinflamatoria, la curcumina exhibe propiedades antioxidantes, lo que significa que ayuda a combatir el estrés oxidativo en el cuerpo. El estrés oxidativo se produce cuando hay un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes en el organismo, lo que puede dañar las células y contribuir al envejecimiento y al desarrollo de enfermedades crónicas. La curcumina actúa como un potente antioxidante, neutralizando los radicales libres y protegiendo así al cuerpo contra el estrés oxidativo.

Propiedades antimicrobianas

Adicionalmente, la curcumina muestra propiedades antimicrobianas, lo que significa que tiene la capacidad de inhibir el crecimiento de ciertos microorganismos, como bacterias, virus y hongos. Estas propiedades pueden contribuir a fortalecer el sistema inmunológico y proteger al cuerpo contra infecciones.

La curcumina como ingrediente anticancerígeno

Asimismo, se ha investigado el potencial anticancerígeno de la curcumina. Aunque la evidencia aún es preliminar y se necesitan más estudios, se ha observado que la curcumina puede tener efectos antitumorales al inhibir el crecimiento y la propagación de células cancerosas, así como al inducir la muerte celular programada en ciertos tipos de cáncer. 

La curcumina, mediante su acción antiinflamatoria, antioxidante, antimicrobiana y potencialmente anticancerígena, se convierte en una opción interesante para el cuidado de la salud. Esto puede ser especialmente relevante en el contexto de enfermedades crónicas relacionadas con la inflamación, como la artritis, la enfermedad inflamatoria intestinal y la obesidad.

¿CÓMO TOMAR CÚRCUMA PARA APROVECHAR SUS PROPIEDADES?

La cúrcuma se puede consumir de varias formas, incluyendo en polvo, como suplemento en cápsulas o como extracto líquido. Para obtener beneficios antiinflamatorios significativos, se recomienda consumir de 500 a 2.000 mg de curcumina al día. Sin embargo, ten en cuenta que la curcumina tiene una baja biodisponibilidad, lo que significa que se absorbe y utiliza de manera limitada por el cuerpo. Para mejorar su absorción, se recomienda combinarla con piperina, un compuesto presente en la pimienta negra.

En cuanto al momento del día para tomar cúrcuma, no hay una restricción específica. Puedes incorporarla a tus comidas principales o consumirla en cualquier momento del día, según tus preferencias y rutina diaria. Sin embargo, algunos estudios sugieren que la curcumina puede tener propiedades beneficiosas para la salud digestiva, por lo que consumirla con las comidas puede favorecer su absorción y aprovechamiento por parte del organismo.

Si optas por consumir cúrcuma en polvo, puedes agregar de 1 a 3 gramos (entre media y una cucharadita) a tus preparaciones culinarias diarias. Es importante destacar que la cúrcuma en polvo tiene un sabor pronunciado y puede teñir los alimentos de color amarillo, por lo que es recomendable utilizarla en platos que combinen bien con su sabor y color, como sopas, guisos, curris, tés o batidos.

Suplementación de la cúrcuma

La curcumina también se puede tomar en forma de suplemento. Hay que tener en cuenta que algunos suplementos contienen extracto estandarizado de curcumina, lo que garantiza una concentración determinada de este compuesto activo. Además, es recomendable elegir suplementos que incluyan piperina o algún otro componente que mejore la absorción de la curcumina. NeoCúrcuma Antiox es una muy buena opción como suplemento, ya que contiene 475 mg de curcumina, además de piperina, que ayuda a su absorción.

Es importante recordar que cada persona es diferente y puede reaccionar de manera distinta a la cúrcuma. Siempre es recomendable consultar con médicos o nutricionistas, especialmente si tienes alguna condición médica preexistente o estás tomando medicamentos, para determinar la cantidad y frecuencia de consumo adecuados para ti. 

LA ESPECIA SAGRADA DE LA CULTURA HINDÚ

La cúrcuma ha sido considerada durante mucho tiempo como una especia sagrada en la cultura hindú. En la tradición india, se cree que la cúrcuma tiene propiedades purificadoras y protectoras. Se utiliza en ceremonias religiosas, como parte de rituales matrimoniales y festividades importantes. Además, es común ver a las novias en la India llevar una pasta de cúrcuma en la piel como parte de un ritual de belleza previo a la boda. Se cree que esto les brinda un brillo y resplandor especial.

Esta importancia cultural y simbólica de la cúrcuma destaca su valor más allá de su uso en la cocina y la medicina. Es un testimonio de cómo las especias pueden tener un papel significativo en las tradiciones y creencias de diferentes culturas en todo el mundo. La cúrcuma ha trascendido su utilidad práctica y se ha convertido en un símbolo de belleza, pureza y auspicio en la sociedad india.

Esta curiosidad nos muestra cómo la cúrcuma no solo es apreciada por sus beneficios para la salud, sino también por su riqueza cultural y su papel en las tradiciones ancestrales. Es fascinante ver cómo una especia tan común puede tener un impacto profundo en diferentes aspectos de la vida de las personas, más allá de su mero uso culinario.